Implosión

Me desarmo, mi cuerpo va transformándose, ya no sé qué es parte mía ni qué es anexado de la vida. La metamorfosis duele, lo sólido se licúa, pareciera que conformara una nueva solidez, hacia mi vientre un nuevo cuerpo viene. Me duele desde mis pies hasta los cabellos, mi estómago siente el fluir de un volcán y mi espalda pareciera ir separando las costillas, una a una para identificar el origen de cada una. Me siento a procesar y evidenciar, observo pasivamente y dudo constantemente, ¿es esto lo que quería de mí? ¿Por qué no? Si la vida se trata, en todo caso, de experimentar, y yo quiero experimentarlo todo, pero siempre siendo distinta. Los fragmentos se encuentran aún separados, no hay masa identificable que se sienta parte de lo mismo. Me cuesta coordinar el movimiento de los dedos, mientras pienso, puta madre qué acidez! Me quema. Y además digo, ya seré nomas alguien sin nombrar, ya será nomas una nadie más. Ya seré, tan solo nadie más que quien yo misma formé. Un año y la vida te da vuelta como una media, no soy la que era, ni la que recuerdo, ahora tengo que entender quién soy en este momento, la cuestión es que siempre me hice la misma pregunta. Nunca tuve nada claro, ahí es cuando encuentro el consuelo de no saber, si nada sé, nada puedo pretender, ni mucho menos tensar la necesidad de otres de fijarme dentro de sus clasificaciones. Mi cuerpo se vuelve robusto, como mi mente, como mis pensamientos, mis cabellos emblanquecen, mis uñas se quiebran antes de llegar a prolongarse por fuera de mis dedos, como siempre. Entonces ¿soy la de siempre? Joder, que difícil de entender. Mi espalda me marca con los dolores la historia caminada. Desde la cintura, desde ese origen que recuerdo doloroso y subiendo estrepitosamente, casi desapercibida llega a los omóplatos, sensibles desde mi pubertad, culminando con una pinza retorcida en mi cuello, preocupaciones originadas por burocracias inútiles. Hoy el cuerpo me retrotrae los dolores emocionales, escribo y ya pasa, nada de víctima, ¡aléjate ya idea putrefacta! Soy afortunada, tengo amor, amistades presentes, historias que contar y todo un nuevo camino que transitar, en eso estamos, arrancando.