Volver al Big Bang

Rodaba entre sus piernas confundiendo su piel con el esmalte generado tras la metamorfosis. Por momentos parecían mecerse en la misma nota musical, los tonos eran muy similares. La roca tenía bordes blandos. Ella de piel reptiliana. Lo que es afuera era adentro, el interior en una, era superficie en otro. A pesar de saberlo lo intentaron. Ella quiso verter su blandura, envolvió y rebalsó. No fue suficiente la voluntad inicial, una mentira cósmica los enfrentó y se odiaron antes de amarse. Todo terminó en el instante que comenzó y en el entremedio ocurrió la eternidad. Un día fue una vida juntxs, nada cambió y sólo quedó el silencio. Rewind, 30 casilleros atrás rodó y cayó en el opi. Blando, rígido, es igual, hay que volver al big bang.